08 julio, 2012

Me mudo

Este blog cambia de dirección, se traslada. Hace apenas seis meses que me instalé aquí a desgranar palabras, a comentar aspectos del lenguaje y ya me estoy cambiando de casa.

Agradezco al propietario de ¡Cuida esa lengua! su hospitalidad -qué más generoso que ceder una obra propia- porque su préstamo fue la forma de ponerme en marcha. Ahora que sé que me gusta salsear en esta nube que nos comunica me independizo porque, como él bien sabe, me gusta estrenar y me encantan los cambios.

Esta es mi nueva dirección: Al sur de la frontera, es la primera parte del título de un libro de Haruki Murakami que me gustó mucho: Al sur de la frontera, al oeste del sol. Espero seguir viéndoles por allí.

06 julio, 2012

Nada fashion

Si a ustedes les gusta el lenguaje, como a mi, sepan que no estamos de moda, que vamos a pasar a ser piezas de museo. En estos tiempos en los que todos hemos aprendido la dura lección de que aquí los que mandan son los mercados, los saberes que no demandan las empresas no son necesarios. ¿Y saben ustedes de muchas empresas que soliciten un filólogo? No, ¿verdad?

La ley de la oferta y la demanda se traslada a las universidades y estas se aprestan a cumplir y formar solo aquellos perfiles que piden los anuncios de trabajo (o "el uso productivo del conocimiento"). Pero ¿no son las universidades centros de difusión del conocimiento? Parece que no, que ahora son centros de formación de trabajadores. Y como, según un estudio de la Fundación BBVA, los graduados en Humanidades son quienes tienen menos probabilidades de encontrar empleo, la suerte está echada. Dejemos de perder el tiempo con estas carreras insensatas.

Estos datos y la crisis han llevado al Ministerio de Educación a plantearse eliminar las clases con menos de 50 alumnos, lo que afectaría sobre todo a la rama de filología.

Entiendo el principio de productividad y eso de aprender lo que haga falta para trabajar pero, qué quieren, es una pena. 

02 julio, 2012

Pardon my spanglish ¡porque because!


 
Bill Santiago es un comediante americano que ha descubierto un filón actuando en spanglish. Además acaba de  publicar un libro que está siendo un éxito de ventas con el hilarante título que encabeza este post y en el que uno puede encontrar "Todo lo que you ever wanted to know about Spanglish, pero estabas afraid to ask".

El fenómeno de las lenguas en contacto es fascinante. Vivo en el País Vasco, una zona donde las palabras en euskera y en castellano pasan de una lengua a otra sin mayor traba que la de ser entendidas por los hablantes. De hecho hay muchas palabras de las que los hablantes vascos (incluso los que no saben euskera) no son conscientes de que sean euskera y no castellano y solo se aperciben de ello cuando alguien de fuera no les entiende.

Recuerdo estar diciéndole a un niño en Jaca si se iba a subir a la txirristra sin que el pobre comprendiera a dónde pensaba yo que se iba a subir, pero es que yo jamás había dicho ni había oído decir en San Sebastián tobogán que sería el significado de txirristra, e incluso llegamos al punto de conjugar el verbo de acuerdo a la regla gramatical española y decimos txirristrarse y jamás bajar por el tobogán.

Bill Santiago explicaba en una entrevista que es que hay palabras que "no se pueden traducir", "que no quieren decir lo mismo", "¿cómo dice uno en inglés chanclas?". Los hablantes bilingües poseen un espacio mental en el que las dos lenguas se entremezclan y machihembran y en el que cuando están en un contexto en el que pueden hablar sin contención -en familia, entre amigos- los dos idiomas se mezclan en el momento de hablar y el hablante elige la palabra que mejor se ajusta a lo que quiere decir, sin pararse a pensar si es español o inglés, euskera o castellano.

Algunos pensarán que es un horror y una aberración, pero a mi me parece que los idiomas en contacto se enriquecen y que los hablantes bilingües (y los amantes bilingües) cuentan con un patrimonio lingüístico duplicado.

27 junio, 2012

Chufómana de nacimiento

Edward Hopper. Room in New York
Una de las posibilidades de los lenguajes es la de crear palabras. Este recurso es innato en las personas, los niños dicen freído aunque nunca lo hayan oído. Construyen los participios a partir del patrón conocido, si de partir se dice partido, de freír se dice freído, no cuentan los pobres con la cantidad de verbos irregulares que hay en castellano.

Pero los adultos, los sesudos hablantes, también hacemos eso constantemente: creamos palabras que no existen. Unas son más exitosas que otras. Uno de estos días la periodista Marta Muñoz-Calero titulaba su columna "Chufómana de nacimiento" aludiendo a lo mucho que le gusta la horchata de chufa. El término cumple una de las funciones del lenguaje y es que se entiende, en seguida nos imaginamos qué quiere decir aunque no hayamos oído nunca la palabra.

Este es el proceso por medio del cual existen palabras recientemente reconocidas por la RAE, a alguien se le ocurrió decir sociatas aunque existía socialistas o bocatas en lugar de bocadillos. Otras palabras se crean porque no hay en castellano una palabra que designe ese significado, por ejemplo bloguero, chatear o sudoku.

Hay a quien le gustaría que el lenguaje no cambiara, que fuera siempre el mismo pero para eso haría falta que el lenguaje estuviera muerto y, por fortuna, es un elemento vivo y en constante cambio.


22 junio, 2012

Chulo, pardillo, muermo

Las lenguas son como los hijos, el nuestro es el más guapo, el más listo y el más simpático. Hemos nacido hablando castellano o euskera o inglés y hacerlo es "lo más natural del mundo". Como dice el chiste "qué raros son estos ingleses que al caballo le llaman horse". Del mismo cariz es esta anécdota hebrea:

"- Papá -dice el hijo del rabino-, lo que comemos, ¿por qué se llama espaguetis?
- Veamos, mi pequeño, reflexiona un poco. ¿No es blanquecino como los espaguetis? ¿No es largo como los espaguetis? ¿No es blando como los espaguetis? Entonces, ¿cómo no llamarlos espaguetis?"*

Por eso, les recomiendo asomarse a una página que enseña español a hablantes de lengua inglesa, además de francés, alemán, italiano y japonés. Lo más curioso de esta página, lo más divertido es ver cómo se enseña español. El último post está dedicado a que los alumnos conozcan algunos insultos o como dicen ellos, "Cómo describir a la gente negativamente en español" (toma eufemismo): "Hoy vamos a ver adjetivos de carácter negativo en español. Today we will see negative Spanish character adjectives such as Chulo (Arrogant), Pardillo (Naive) and Muermo (Boring)."

Curiosos insultos, ¿no? No veo al más pacífico de los protagonistas de "The Wire" llamando a alguien chulo, pardillo o muermo, allí lo más cariñoso es motherfucker, pero evidencia que el castellano es rico en matices porque la lista continúa con pijo, carca, payaso o agarrado e informa a sus alumnos de que estos insultos los pueden oír en televisión (en USA oirían un pitido, supongo).

¿Qué pensarán de nosotros? ¿Que somos unos maleducados, además de unos bárbaros por matar toros? Quién sabe, por lo menos creo que con esto de la crisis los americanos han aprendido que España no esta en Méjico. Algo es algo.


*Yaguello, Marina: Alicia en el país del lenguaje.

19 junio, 2012

A mano

Hay palabras que dan mucho juego y mano es una de ellas. El término mano es materia prima de muchos significados: podemos tener manos de mantequilla o tener buena mano, hay quien tiene mano izquierda, quien se lava las manos, quien tiene la mano larga y también hay remedios que son mano de santo.

El dictador hace las cosas manu militari, el ladrón tiene manos de plata, algunos tienen las manos manchadas de sangre o son unos manirrotos y otros lo dejan todo en manos de los demás. A veces hace falta mano dura y otras mano de obra.

La crisis nos dejará con una mano delante y otra detrás, ojalá que no haya que atracar a mano armada ni sobornar bajo mano. Con los políticos no sabemos si estamos en buenas manos porque nos sentimos dejados de la mano de Dios. Cualquiera pide la mano de su novia en estos tiempos, puede que se vaya con las manos vacías o puede que el suegro nos pida que le echemos una mano.

Hay todavía unas cuantas expresiones más pero no quiero aburrirles, les dejo con la versión de Nacha Guevara del poema de Mario Benedetti "Tus manos".




14 junio, 2012

Entre la desesperación y la serendipia


Ayer recibí en mi correo un artículo de Ignacio Molina titulado "La integración europea entre la desesperación y la serendipia". Vaya, otra de esas palabras evocadoras que no sé qué diablos significa. Me voy a tener que replantear mis conocimientos léxicos porque llevo una temporada francamente terrible, o estupenda, según como se mire.

Serendipia es la traducción literal del inglés serendipity y significa 'encontrar algo afortunado o inesperado cuando se está buscando otra cosa'. El término fue acuñado por Horace Walpole allá por 1754 tras leer un cuento tradicional persa titulado "Los tres príncipes de Serendip", en el que los protagonistas solucionaban sus problemas a través de increíbles casualidades. ¿Y qué era Serendip? Serendip era el nombre árabe de la isla de Ceilán, actual Sri Lanka, en Tamil era Seren deevu y en sánscrito Suvarnadweepa.

A mi la palabra me recordó una película titulada así mismo "Serendipity" que vi en su día y a cuyo póster corresponde la imagen de esta entrada. Recuerdo que me llamó la atención el título pero como hay tantas películas cuyo título no se traduce, no le dí más vueltas.

Entonces no se me ocurrió buscar la traducción, pero fíjense qué curioso, Serendipity consiguió en 2004 el extraño reconocimiento otorgado por una empresa inglesa de traductores de ser una de las diez palabras más difíciles de traducir del inglés. Ahí es nada.

Pensando en el significado de serendipia me ha venido a la memoria el término chiripa, uno de cuyos significados es semejante (una casualidad favorable) y que carece de un pasado etimológico claro. ¿No les parece que pudiera provenir de serendipity? Anímense a sugerir teorías.

Para volver a la primer línea y buscar un poco de optimismo en este maremágnum de malas noticias, sepan ustedes que un final feliz es posible. Es lo que viene a decir el artículo que les menciono y que les recomiendo leer, que es posible que a partir de esta situación catastrófica, Europa encuentre un mayor reforzamiento, algo que no estaba buscando cuando todo empezó a ir mal: una serendipia. Y será de chiripa.

07 junio, 2012

Inmiscible y promiscuo

La Japonaise, 1876, Claude Monet

¿Ustedes dirían que inmiscible y promiscuo tienen algo que ver? Así a bote pronto yo diría que no, si nos fijamos con detenimiento veremos que ambas palabras comparten el grupo 'misc'. Quizás el significado nos ayude un poco. Inmiscible significa 'que no se puede mezclar', es una palabra que se usa mucho en traducciones de textos químicos para aludir a las sustancias que no se mezclan entre sí como, por ejemplo, el agua y el aceite. Me parece una palabra con un significado muy expresivo e importante, pero debo reconocer que yo no creo haberla usado nunca.

Promiscuo nos resulta mucho más familiar, todos sabemos lo que significa y la usamos más o menos a menudo. Promiscuo expresa precisamente lo contrario que inmiscible porque promiscuo es 'lo que se mezcla'.

¿Qué tienen en común? Pues nada más y nada menos que la misma raíz latina: el verbo 'miscere', que dio en castellano mezclar. Es una raíz muy fértil de la que provienen también mestizaje, mixto, miscelánea, inmiscuir y mezcolanza, además de todos los derivados de cada una de estas palabras.

Ya lo saben: hay cosas inmiscibles nada promiscuas.

05 junio, 2012

¿Niké o 'naik'?


En una visita al Museo del Louvre me di -literalmente- de bruces con "La Victoria de Samotracia". Su belleza me pilló tan desprevenida que me quedé sin aliento. ¡Cómo es posible que una escultura sin brazos y sin cabeza tenga ese porte, esa dignidad, esa perfección...! Fue uno de esos extraños instantes en los que el tiempo se suspende y parece que nadie antes en el mundo hubiera visto aquella estatua imponente hasta que uno la ve.

Esta introducción viene a cuento porque "La Victoria de Samotracia" representa a la diosa Niké, la diosa griega de la victoria. Para la mayoría del mundo mundial Nike es una marca de zapatillas y ropa deportiva, pero el emporio Nike le debe su nombre a esta diosa a la que se le atribuían excepcionales cualidades para saltar y correr a gran velocidad, además de contar con la capacidad de atraer la buena suerte.

Por todo esto deberíamos decir Niké y no "naik", pues se trata de un nombre griego y no inglés, pero les aconsejo que sigan diciendo "naik" si no quieren que les miren como a paletos y además tampoco están los tiempos para alardear de cultura helénica.

Es un nombre perfecto para una marca deportiva ¿verdad? pues hay otro también muy bueno del que les hablaré otro día.

26 mayo, 2012

Apadrine una palabra


Reserva de palabras es una página que se dedica a rescatar y mantener vivas palabras que ya no se usan. Esta web cuenta con la participación de más de 20.000 personas de 69 países diferentes y tiene una iniciativa gemela en catalán: Reserva de paraules.

¿Cómo lo hacen? Los internautas proponen una palabra, algún término que consideren en vías de extinción, una voz que resuene en su memoria como uno de esos olores que de repente abren todo un mundo de recuerdos, y sugieren su apadrinamiento para que su uso no se pierda.

Reserva de palabras tiene un ranking con las voces más apadrinadas. ¿Saben ustedes cuál es la primera?: Bochinche, ¿saben cuál es la que más me gusta a mi de esa lista?: Zangolotino. Una palabra preciosa, caída en desuso (aunque no sé si alguna vez se usó mucho) y que me parece insustituible y muy descriptiva.

Javier Cercas habla de la palabra en este texto:

"La única vez que he oído pronunciar esta palabra fue en una película, "Viaje a ninguna parte", de Fernando Fernán Gómez. Se la dice José Sacristán a Gabino Diego, que en la ficción es su hijo adolescente, y que la encaja como un peso mosca dispuesto a morir de pie; no es exactamente un insulto pero, si no recuerdo mal, Sacristán la dice como un insulto (o como un insulto compasivo) y así la encaja. Sin embargo, la Real Academia afirma que un zangolotino es solo un muchacho que quiere hacerse pasar por niño. Nadie usa ya la palabra (al menos con esa acepción); además, carece de sinónimo. Pero no es cierto que las palabras creen la realidad, porque el mundo sigue estando lleno de zangolotinos (de hecho no hay joven o adolescente que, a lo largo del día, no sea un zangolotino), solo que no sabemos cómo llamarlos. Padres y madres de adolescentes: el asesinato no es la solución; la compasión, sí: no son más que unos zangolotinos."

Utilícenla, seguro que tienen alguien a su alrededor que es un zangolotino.


24 mayo, 2012

Oír / Escuchar


A veces, los escogidos lectores que tiene una le hacen una petición o le sugieren un tema. Esta entrada está especialmente dedicada a Marisa.

"Más que recuperar una palabra me conformo con que no se pierda definitivamente la distinción entre "oír" y "escuchar". Ya nadie oye, todo el mundo escucha. Lo cual podría estar bien, si no fuera porque "escuchar" ya no significa prestar atención a lo que se oye, sino simplemente percibir sonidos con el tímpano. Así escucha, por ejemplo, Eduardo Zaplana. Si recuperáramos esta distinción, y con ella el antiguo significado del verbo "escuchar", igual nos volvíamos más comprensivos con los argumentos que expresan los demás."

Antonio Orejudo, escritor español, autor de Ventajas de viajar en tren.

21 mayo, 2012

¿Por qué aprendiste euskera?


 George Henry Borrow fue un personaje muy curioso. Aunque nunca llegó a terminar la carrera de Filología fue capaz de traducir treinta y cinco lenguas y numerosos dialectos. Era un apasionado del lenguaje y un feroz defensor de la propagación de la Biblia. En uno de sus numerosos viajes recaló en España y en un libro titulado La Biblia en España escribe lo siguiente sobre el euskera:

"Hay muy pocos alicientes para el estudio de esta lengua. En primer lugar, su adquisición es completamente innecesaria, aun para los que residen en el territorio donde se habla, porque la generalidad entiende el español en las provincias vascas pertenecientes a España y el francés en las pertenecientes a Francia. En segundo lugar, ninguno de sus dialectos posee una literatura propia que recompense el trabajo de aprenderlo. Existen algunos libros en vasco pero son exclusivamente libros de devoción papista y en su mayoría traducciones".

Curiosa opinión para alguien que se molestó en aprender esta 'lengua innecesaria' en la que escribió un Evangelio de San Lucas, no fuera a ser que, a pesar de los pesares, los vascos se inclinaran a leer a la competencia.

Si alguien está interesado en este filólogo-viajero-hispanista-difusor de biblias protestantes puede unirse a su grupo en Facebook.

18 mayo, 2012

No censurar, no zaherir...



"Aprendí de Alejandro el gramático, el no censurar; no zaherir a quienes se les fue un barbarismo, un solecismo o cualquier viciosa pronunciación; sino anunciar con maña aquella única palabra que convenía proferir, bajo la forma de una respuesta, de una confirmación o de una deliberación sobre el fondo mismo, no sobre la forma, o por otro medio apropiado de hábil sugerencia."

Marco Aurelio, Meditaciones.

15 mayo, 2012

Dando nombre a 900 millones de caras


Facebook -el libro de las caras- una de las palabras más utilizadas en el mundo mundial, tiene origen latino, sí, sí, como lo oyen ustedes.

Face proviene de la raíz latina faz que significaba 'rostro, cara, aspecto' (y sigue significando). Es curioso que en castellano para designar el rostro haya prevalecido el término cara y que sin embargo, tengamos tantos derivados de la raíz faz (que en la Edad Media se pronunciaba haz) como por ejemplo facial, fachada, desfachatez, faceta, antifaz y aun superficie o superficial. Incluso una preposición tan importante y tan usada como hacia se deriva de la expresión face a, de cara a.

Ya lo saben ustedes, cuando quieran presumir de idioma pueden afirmar sin cortarse un pelo que el famosísimo Facebook, debe una parte de su nombre a una fértil raíz latina.


* La inspiración de esta entrada se la debo al profesor José Enrique Gargallo.

09 mayo, 2012

Iñaki Urdangarín: ¡La Ortografía importa!


No es que pretenda hacer leña del árbol caído, pero este blog me parece el sitio adecuado para recalcar algo que hasta ahora no he oído en los medios: ¿Iñaki Urdangarín no sabe escribir sin faltas de ortografía?

Y no me refiero a los signos de puntuación, que están diseminados por sus correos al buen tuntún, o a ese "asegurémonos de que el equipo de la reunión le reporta", ni al  "porque sino queda extraño" o a la falta de acentos en los pronombres relativos... que al final una se va acostumbrando a todo, pero "a recibido" es muy, muy fuerte. Esa es la gota que colma el vaso y que nos da la medida exacta de la cultura del Duque de Palma.

A ver cómo se las arreglan los maestros para explicarles a los alumnos que la ortografía importa, si puede uno casarse con la Infanta y trabajar y relacionarse al más alto nivel sin saber escribir sin faltas.

02 mayo, 2012

De cómo no llamar a las cosas por su nombre

Los eufemismos, o la manera de no llamar a las cosas por su nombre, son un fenómeno lingüístico de plena actualidad porque las palabras son un arma cargada de significado.

La guerra es un conflicto de violencia generalizada, los bombardeos son incursiones y las víctimas civiles, daños colaterales. Eufemismo donde los haya, el genocidio es limpieza étnica, que suena mucho mejor todavía porque suena a limpio. De los terroristas cuando no nos atrevíamos a llamarles así, decíamos que eran independentistas y aun que llevaban a cabo una lucha armada, la extorsión era un impuesto revolucionario, una especie de IRPF para empresarios, y el terrorismo aun hoy en día es el conflicto.

Lo políticamente correcto nos dice que los viejos son personas de la tercera edad, los gordos no son tales sino que tienen un problema de peso o tienen curvas, los ciegos son invidentes, los cocineros son restauradores (¿qué tendrá de malo ser cocinero?) y el que dimite pone su cargo a disposición de. El aborto es una interrupción de la maternidad, el cáncer una larga enfermedad, el muerto nos ha dejado o ha pasado a mejor vida, los moribundos son enfermos terminales y los locos, enfermos mentales.

El paro es una evolución negativa de la tasa de ocupación y el despido una flexibilización de la plantilla. Una bajada de sueldos es una devaluación competitiva de los salarios, la crisis es una desaceleración y los recortes, son solo ajustes.

El premio en esto de los eufemismos en tiempos de crisis se lo lleva Cataluña, donde al copago sanitario pretendieron llamarle ticket moderador sanitario, para que luego digan que los funcionarios son personas carentes de imaginación.

* Viñeta de El Roto, naturalmente.

30 abril, 2012

Género versus sexo



Voy a iniciar con este post la publicación de algunas normas que orienten a los despistados, a los que no saben dónde buscar y a los que no encuentran aunque busquen desesperadamente (como a Susan). Me baso en un librito editado por el Instituto Cervantes, Guía práctica del Español Correcto que escrito por Florentino Paredes García hace honor a su título y es sumamente práctico.

Un tema que induce a confusión es el del género, a menudo confundimos género y sexo. Mientras género es una propiedad gramatical que se aplica a las palabras, el sexo es una característica biológica de los seres vivos. Algunos idiomas tienen dos géneros: femenino y masculino, pero otros -como el alemán- tienen tres: femenino, masculino y neutro. En la adjudicación de un género determinado a las cosas no existe lógica alguna, la palabra mesa pertenece al género femenino y la palabra sol al género masculino pero no hay ninguna razón, más allá de la etimología, para que esto sea así. De hecho conocer el género de las palabras suele ser uno de los escollos a la hora de aprender una lengua. Entre los estudiantes de español es habitual que se guíen por la terminación "a" a la hora de adjudicar el género femenino y ciertamente les servirá en general pero también se encontrarán diciendo "la sistema" o "la programa".

Veamos cómo debemos actuar en los nombres de profesiones:

Si el nombre de una profesión o cargo está formado por un sustantivo y un adjetivo, ambos elementos deben concordar en género, dependiendo del sexo del referente: debe decirse la primera ministra, una guarda jurada, una detective privada, etc., y no la primera ministro, una guarda jurado, una detective privado.
La regla es clara: coherencia.

27 abril, 2012

Los chinos aprenden inglés



Hoy les traigo uno de los anuncios del banco HSBC (The  Hong Kong and Shanghai Banking Corporation). En él se dice, como ven ustedes en la foto, que hay cinco veces más gente aprendiendo inglés en China que habitantes tiene Inglaterra.

Curioso, ¿verdad? Este anuncio estaba colgado en el aeropuerto de Nueva York e hizo que me detuviera en seco. ¿Cómo es posible que haya más gente aprendiendo inglés en China que habitantes tiene la propia Inglaterra? Es un dato que choca si tenemos en cuenta que los chinos son casi 1.340 millones de personas y que el país posee una pujante economía. En esa tesitura lo lógico sería que los chinos esperaran que fuéramos los demás quienes aprendiéramos su idioma. Pero leamos la letra pequeña del anuncio (los bancos siempre tienen letra pequeña): "El mundo pertenece a aquellos que ven su potencial".

En este mundo global los chinos aprenden inglés, los americanos lidian con el español y nosotros tendremos que aprender inglés y chino si queremos viajar y hacer negocios con el mundo. No me parece mal asunto, estoy convencida de que hablando se entiende la gente.

24 abril, 2012

Del ir y el volver












Los viajes se inician con alegría y, en mi caso al menos, se finalizan con alegría. En este paréntesis tan largo he ido y vuelto dos veces. El primero de los viajes devolvió a casa una persona más feliz, los ojos llenos de belleza, el alma crecida y la sonrisa perenne en la boca.

El segundo de los viajes, casi un viaje en el tiempo más que en la distancia, ha sido como una terapia de choque y ha devuelto a mi casa a una mujer llena de impotencia,  desgarbada  por el peso de lo visto y con los ojos irritados de tanta tierra quemada.

El que se va es distinto del que vuelve y hasta la misma realidad que se dejó es distinta cuando regresas porque tu la ves de otra manera. Siento no haberles escrito al regreso del primer viaje porque las líneas hubieran danzado solas. Ahora que todavía no he digerido el segundo, debo por fin hacer acto de presencia esperando que las palabras que desgrano aquí me eleven un poco. Algún día tendré también que hablar de la incomunicación más allá de las palabras.

No obstante, sigan viajando.             

06 abril, 2012

¡Ay, los tósigos!


Encontrar una palabra nueva me produce una gran alegría. Es como una sorpresa, tus ojos recorren una línea acostumbrados a lo habitual y de repente, zas, ¿qué es esto? ¡Una palabra desconocida!

Dentro de esta categoría, las mejores son las que no me suenan a nada, las que no despiertan en mi ningún eco, las que me desconciertan. A esta clase pertenece tósigo y la encuentro en este contexto: "¿Qué es esta locura de padecer tósigos y sofocos si no hay nadie que nos quiera, y tósigos y ansias cuando nos quieren?"*. Debe ser algo que se padece pero no parece solo negativo porque también nos acaece cuando nos quieren.

Veamos qué dice la Academia:

tósigo
.

(Del lat. toxĭcum, y este del gr. τοξικὸν φάρμακον, veneno para emponzoñar las flechas).
1. m. Veneno, ponzoña.
2. m. Angustia o pena grande.


Así que eso era, una angustia, una pena, un veneno. ¿No me digan que no es una palabra preciosa? Aprópiensela y suéltenla cuando menos se la espere su interlocutor. La sorpresa está asegurada.

* La cita es del libro El Tejado de Vidrio de Andrés Trapiello, Valencia, 1994.

03 abril, 2012

Un poco demasiado

Hace unos días les hablaba de cómo crecía el español en Estados Unidos, ahora que escribo tras un viaje a la Costa Este de ese país, les quiero comentar una noticia publicada en "El Tiempo Latino", un periódico editado por The Washington Post, lo cual en sí mismo ya dice bastante de la fuerza del castellano.

El periódico explica que en el condado de Frederick, en Maryland, [situado al noroeste de Washington DC] una ordenanza que ha establecido el inglés como idioma oficial ha levantado ampollas entre las comunidades de habla no inglesa, sobre todo entre las de origen hispano.

Sí, sí, han leído bien, los inmigrantes no están de acuerdo con que el inglés sea declarado idioma oficial. Las autoridades se apresuran a explicar que nada cambiará de hecho: "Se seguirán enseñando otros idiomas en las escuelas y prestando servicios de traducción en las cortes" a lo que el presidente de la Cámara de Comercio Hispana MID-Atlantic, Jorge Ribas, le responde: "Si no cambia nada, lo único que está haciendo es intimidar a una comunidad inmigrante creciente, especialmente a la gente que emigra cuando es adulta y se le hace difícil aprender el inglés". ¿Mande? Está muy bien que el español extienda sus dominios pero esto me parece francamente excesivo.

Algunos hispanos se avienen a dulcificar un poco su postura: "Todos sabemos que para tener éxito debemos aprender el inglés, pero por qué hacer énfasis en oficializarlo", mientras otros conservan los pies en el suelo (y no es coña por lo de la zapatería): ""Para mí el inglés siempre fue el idioma oficial... Estamos en U.S.A.", dijo a The Washington Post Alex Ramos, quien emigró de El Salvador hace 23 años y es dueño de una zapatería".

¿Se imaginan ustedes que los alemanes de Mojácar, por poner un ejemplo, protestasen por que el idioma español sea declarado oficial? Pues eso.

02 abril, 2012

¿Vivimos en la cultura de la imagen y no en la de la palabra?

Uno de estos días leyendo Moonlight Mile de Dennis Lehane, un buenísimo autor americano de novela negra, me sorprendieron un par de párrafos de este libro. Tras entrevistar a un grupo de chicas adolescentes, el protagonista se hace la siguiente reflexión:

"After my daughter was born, I'd considered buying a shotgun to ward off potential suitors fourteen or so years up the road. Now, as I listened to these girls babble and imagined Gabby one day talking with the same banality and ignorance of the English language, I thought of buying the same shotgun to blow my own fucking head off.Five thousand years of civilization, more or less, twenty-three hundred years since the libraries of Alexandria, over a hundred years since the invention of flight, wafer-thin computers at our fingertips, which can access the intellectual riches of the globe, and judging by the girls in that room, the only advanced we'd made since the invention of fire was turning like into an omni-word, useful as a verb, a noun, an article, the whole sentence if need be."

Y, claro, no podía estar más de acuerdo con él. Esta es una traducción libre de los párrafos anteriores:

"Tras el nacimiento de mi hija, consideré la posibilidad de comprar una pistola para ahuyentar a los posibles pretendientes. Ahora, al escuchar a estas chicas balbucear sin sentido, imagino a mi hija Gabby hablando un día con la misma banalidad e ignorancia del idioma inglés, y pienso en utilizar esa pistola para pegarme un tiro en la cabeza.Cinco mil años de civilización, más o menos, dos mil trescientos años desde la Biblioteca de Alejandria, más de cien años desde la invención del vuelo, tras tener acceso a través de los ordenadores a toda la riqueza intelectual del mundo... compruebo, a juzgar por el lenguaje de esas chicas, que el único avance que hemos realizado desde la invención del fuego ha sido convertir como en una especie de palabra omniprensente que se puede usar como verbo, nombre, artículo o, incluso, como una frase completa si fuera necesario."

¿No les parece que otro tanto podríamos decir del español cuando escuchamos una conversación entre adolescentes? ¿Es una coincidencia o hay algún tipo de conexión? ¿Quizá es que vivimos en la cultura de la imagen y no en la de la palabra? ¿O siempre ha sido así y no recordamos nuestras carencias de adolescentes?


PD. Por cierto, les recomiendo vivamente el libro, es buenísimo.

15 marzo, 2012

La ortografía importa


Este que tienen ustedes aquí es uno de los carteles de la campaña electoral del PSOE en Andalucía. Y sí, están ustedes viendo bien: Elije con jota.

El cartel lo habrán redactado publicistas varios, lo habrán corregido otros tantos, lo habrán presentado a gente del PSOE que habrá dado el visto bueno y que lo ha colgado en su página web... ¡Y nadie se ha dado cuenta!

Pues no, pero no todo está perdido, no se tiren de los pelos demasiado porque la buena noticia es que a alguien le ha saltado a la vista en Twenti y ha dado la voz de alarma. A partir de ahí podemos decir que al PSOE le crecen los enanos y que tienen un serio problema con la ortografía.

Señores políticos, la educación debería empezar por uno mismo y sí, la ortografía importa.

13 marzo, 2012

Un cruce de cables


No sé si ustedes recordarán un par de errores lingüísticos que fueron muy famosos cuando se produjeron. En su momento nos causaron gran hilaridad a pesar de que los que los cometieron sufrieron un “cruce de cables” que nos puede pasar a cualquiera. Pero los autores eran famosos, tenían un micrófono delante y el error fue objeto de chanza nacional.

Sofía Mazagatos era una incipiente modelo, una mujer muy guapa que se prodigaba en los saraos y que un aciago día dijo: "Me gustan los toreros que están en el candelabro". Sofía Mazagatos quería decir “…que están en el candelero”, que es una expresión que significa estar en primer plano, pero se le cruzaron los cables, le sonó raro eso de “candelero” y en su lugar dijo “candelabro”. La modelo después de la que se organizó se tomó unas largas vacaciones en Nueva York para evitar que cada vez que ponía un pie en la calle, alguien le mentara la ocurrencia.

Jesús Gil y Gil, el que fuera presidente del Atlético Madrid, hizo el siguiente comentario de un jugador: “Cierra las discotecas y sale con mujeres ostentóreas”. El ex alcalde marbellí quiso decir que las mujeres con las que alternaba el jugador eran espléndidas, deslumbrantes, llamativas… y le vino a la mente el adjetivo ostentosas, pero simultáneamente su cerebro le envió otro adjetivo también muy sonoro y de aspecto culto: estentóreas, que significa según el DRAE ‘muy fuertes, ruidosas o retumbantes’. Al señor Gil y Gil también se le cruzaron los cables y dio a luz, para choteo general, el híbrido ostentóreas.

En Gramática este “cruce de cables” se denomina precisamente cruce: “acción y efecto de cruzarse dos palabras o formas gramaticales generalmente sinónimas”, de suerte que se configura una nueva que reúne caracteres de ambas. Vamos, un lapsus.

10 marzo, 2012

Sorosoro


Salseando por Internet he encontrado una página muy interesante para los amantes de las lenguas. Se trata de www.sorosoro.org y está disponible en francés, inglés y español. Fue creada en 2008 por la Fundación Chirac y tiene el objetivo de preservar la diversidad lingüística; como dice el subtítulo de la página: “¡Para que las lenguas del mundo vivan!”.

Es este un tema con el que los franceses son muy sensibles, pues llevan años viendo cómo el francés pierde hablantes y sobre todo, influencia. Y algo no menos doloroso para ellos, cómo la ganan el inglés y el español.

“Sorosoro" es una palabra del araki que significa “aliento, palabra, lengua”. El araki es una lengua en peligro de extinción (si es que todavía está viva en estos momentos) que en 1999 era hablada por quince personas y en 2008, por ocho en una isla de la Polinesia.

Sorosoro.org ofrece información sobre cada una de las 6.000 lenguas que se hablan en el mundo y tiene una aplicación muy curiosa que las sitúa en un planisferio. Según los expertos, aproximadamente la mitad de esas lenguas, es decir, unas 3.000 están amenazadas de extinción.

En la web se ofrece también la posibilidad de escuchar testimonios grabados de las lenguas que se consideran en trance de desaparecer, un equipo de lingüistas se ocupa de viajar a los más recónditos rincones del planeta para recoger grabaciones de los ancianos del lugar.

Si disponen de cinco minutos utilícenlos dándose una vuelta por este mundo de lenguas.

08 marzo, 2012

En lengua materna

Hoy les voy a recomendar un libro. Confieso que me lancé a por él atraída por la portada. Nunca había oído hablar del autor ni sabía si la novela era una de espías, de aventuras o un auténtico tostón. Pero se titulaba "En lengua materna", y con ese título ¿cómo no sentirse atraída?

Leí la contraportada del libro y vi que al absoluto desconocido que era Chang-Rae Lee para mi, le comparaban con John Le Carré, un autor que me fascina. También decían que era una "primera novela", mal asunto pero no lo suficiente como para dejarlo, y describían al protagonista: "Henry Park tiene poco más de treinta años, es hijo de inmigrantes coreanos y ya no vive con Lelia, su mujer americana. Ella, antes de abandonarlo le ha dejado una lista en la que enumera sus "cualidades": maravilloso en la cama pero extranjero emocional, neoamericano, traidor, espía..." Fue más que suficiente para mi.

Hoy se lo recomiendo cometiendo otro error, no he terminado de leerlo, pero estoy irremediablemente atrapada. Si pueden, no se lo pierdan. Por si mi entusiasmo no es suficiente, les dejo un fragmento:

“Lo que supe al instante fue lo siguiente: sabía hablar. Al principio la tomé por alguien en exceso purista, pero pronto caí en la cuenta de que lo único que hacía era utilizar la lengua, simplemente. Pronunciar las cosas palabra por palabra. Cada letra tenía una frontera. Y yo observaba cómo su boca ancha y llena iba pasando por las frases como una figura que se deslizara por una casa oscura, deteniéndose en puntos y retazos de luz perfectamente definidos.”


Chang-Rae Lee. En lengua materna. Anagrama. Traducción de Jesús Zulaika.

05 marzo, 2012

A vueltas con el género

Estos días está de plena actualidad el llamado “lenguaje sexista” debido a la publicación por parte de la RAE de un informe que comenta las numerosas “Guías de lenguaje no sexista” publicadas estos últimos tiempos. El informe pretende poner orden en los diversos criterios pero ha sumido a los medios de comunicación en el escándalo.

Para comprender el profundo “defecto de género” del lenguaje en general, quizá debamos remontarnos al Génesis, pues según él fue Adán, y no Eva, quien dio nombre a todos los seres vivientes.

En castellano el masculino se utiliza para referirse a personas o grupos de género no determinado y también para grupos que incluyen los dos géneros. La norma del español es pues que el mundo es masculino a menos que se demuestre lo contrario.

Hasta hace poco el significado de ‘hombre’ según el Diccionario de la RAE era ‘1. Ser animado racional’ y ‘2. Varón (ser humano de sexo masculino)’, ahora a ‘ser animado racional’ se le ha añadido ‘varón o mujer’, de donde se deduce que cuando leamos que “el hombre actual tiene una esperanza de vida de 78 años” podemos suponer que se está refiriendo tanto a hombres como a mujeres. Sin embargo, siguen en vigor expresiones como ‘hombre de estado’, ‘hombre de letras’, ‘hombre al agua’ u ‘hombre de negocios’.

Una misma palabra es un elogio si se usa para un varón: querido, zorro, fulano, hombre público, un profesional… y un insulto si se usa en su forma femenina: querida, zorra, fulana, mujer pública o una profesional (recordemos el malentendido que se formó cuando el Rey se refirió a la Reina con este adjetivo). Y si algo es fantástico es “cojonudo”, pero si es aburrido es un “coñazo”.

El lenguaje se resiste a imposiciones y tiene tendencia a perpetuar la costumbre. De ahí que por mucho que las distintas guías nos insten a usar expresiones “no sexistas” algunas recomendaciones tienen, en mi opinión, pocos visos de prosperar. El lenguaje irá feminizándose según lo vaya haciendo la sociedad, a nadie extraña ya que haya juezas, doctoras o directivas, aunque “miembras” del Congreso nos ha parecido a la mayoría un poco excesivo y fuera del sentido común.

Pero consolémonos, nuestro idioma no es el único en discriminar en función del sexo, en algunas culturas las restricciones del vocabulario de la mujer con considerables. Entre los cafres del sur de África, la mujer no puede pronunciar muchos de los nombres masculinos de la familia de su esposo, y ninguna palabra que contenga alguna sílaba de aquellos nombres. Hablar se volvía tan complicado para ellas que las mujeres casadas han terminado usando un lenguaje alternativo. Ahora que lo pienso, no sé si es mucho consuelo.

PD. Totalmente de acuerdo con el artículo de Rosa Montero